Evita sumergir la base de la olla programable en agua o cualquier líquido. Esto podría dañar los componentes eléctricos y provocar riesgos de descarga eléctrica.
Mantén las salidas de vapor libres de obstrucciones. Estas son esenciales para liberar la presión de forma segura durante el funcionamiento.
Durante y después del uso, ten cuidado al liberar el vapor. Usa utensilios o guantes para evitar quemaduras, ya que el vapor puede alcanzar temperaturas muy altas.
No llenes la olla por encima del nivel máximo indicado. El exceso de líquidos o alimentos puede obstruir las válvulas de vapor y provocar un mal funcionamiento o derrames.
Coloca la olla en un lugar seguro, lejos del alcance de los niños, especialmente durante el funcionamiento, para evitar accidentes relacionados con el vapor o el calor.
Una vez que termines de usar la olla programable, apágala y desconéctala del enchufe para evitar riesgos de cortocircuitos o sobrecalentamientos.
Aunque la olla es programable, supervisa su funcionamiento especialmente si es la primera vez que usas un programa o receta, para detectar posibles problemas.